lunes, 26 de noviembre de 2007

Periodismo ciudadano y ACA

Es cierto que lo que voy a comentar no lo hemos discutido en la agrupación de colectivos ciudadanos ACA, pero es una necdesidad que arrastramos todos los colectivos para la que me gustaría plantear ya soluciones: dotarnos de medios para la coordinación de esfuerzos y la conquista de las libertades y fundamentalmente de la de expresión, atacada con episodios tan torpes y abominables como el que hemos vivido en Laviana con leyes medievales aplicadas a la ciudadanía que protesta contra la administración.

Los nuevos medios están ahí ya, a nuestro alcance y entre ellos muy fundamentalmente Internet, como algo muy nuestro, directo, para ser utilizado mayoritariamente por los ciudananos en defensa del interés gneral.

Algunos de nuestros coloectivos ya disponemos de página Web que muchas veces nos cuesta actualizar porque el encargado no está dipsonible y no tenemos medios para pagar un técnico. A veces son pequeñas cosas muy elementales, que de controlarlas harían de nuesra presencia en la sociedad algo mas contundente para resolver los problemas que nos rodean.

Si los ciudadanos, individualmente o en colectivo, utilizásemos con mas eficacia medios como Internet, seguro que los poderes fácticos se lo pensarían dos veces ants de atacarnos como hacen, cada día con más osadía y dureza.

Hay que defenderse. Para ello hago una propuesta a colectivos y ciudadanos.

ACA, en colaboracion con El Comentario TV y otros medios (todos los que se apunten), podemos avanzar un paso más en nuestra autoorganización, que no es otro que desarrollar nuestra capacidad de comunicación. Para ello planteo organizar unos cursos de formación digital para entrar en Internet con la fuerza que necesitamos, sin depender de mediadores técnicos:

Legislación y marco legal de la comunicación en Internet.
Creación y diseño de blogs, aprendiendo a hacer enlaces, colgar ilustraciones vídeos y mapas.
Ilustraciones digitales, uso elemental de programas de diseño gráfico.
Edición de vídeo digital.

domingo, 25 de noviembre de 2007

"El astillero, perdonen las molestias"

Un reportaje entretenido, realista, bien hecho pero… algo corto. Aparece la intervención, mejor dicho el papelón, de los sindicatos mayoritarios en ponérselo fácil a la patronal para ir resolviendo los conflictos en beneficio de esta y no de los trabajadores. Pero no queda clara la intervención de los partidos políticos en la resolución de uno de los conflictos más graves que se trata: el encarcelamiento de Cándido y Morala. El espectador que no haya vivido de cerca el conflicto, y pueden ser muchos, no sabe que fueron el PSOE e IU del Ayuntamiento de Gijón los principales instigadores y agentes del encarcelamiento. Por cierto en el reportaje tampoco queda claro que los dos líderes sindicalistas pueden volver a la cárcel, porque aun no han conseguido la libertad provisional.
No aparecen algunas de las movilizaciones que supusieron gran enfrentamiento al poder político por parte de la ciudadanía y de los trabajadores de los astilleros. Por ejemplo frente al Ayuntamiento. Alguien que no haya vivido de cerca las últimas movilizaciones no se entera, por el reportaje, que el movimiento vecinal-ciudadano apoyó las reivindicaciones de los trabajadores, especialmente contra el encarcelamiento de Cándido y Morala.
Sales de la sala con la impresión de no haber entrado realmente al fondo de lo que estaba pasando. Se habla de especulación pero no se da una imagen del volumen de la misma ni se encuadra en el entorno en que ésta se ha planificado YA, con todas las consecuencias que conlleva: transformación de sectores productivos y generadores de empleo y riqueza, que desaparecen, por implantación masiva de ladrillo y cemento como método más fácil y corrupto de generar riqueza para unos pocos.
¿Qué pinta Javier Bauluz en el documental? ¿Ha tenido o está teniendo un papel siquiera mínimo en el conflicto actual?

lunes, 19 de noviembre de 2007

A pesar del poder, estaremos en Navia con Juan Vega

Un buen número de colectivos ciudadanos integrados en ACA propusimos a David Piñeiro que el mejor candidato al premio Libertad de Expresión para este año, en su modalidad regional, era Juan Vega. Parte de nuestros argumentos se basaban en las posibilidades abiertas para el movimiento vecinal con EL COMENTARIO.TV. Un espacio donde poder colocar nuestras inquietudes, nuestros problemas y reivindicaciones. David nos hizo caso a pesar de los pesares. O sea, a pesar de ser consciente de no contar con subvenciones para el evento, que la Consejería de Justicia aportaba año tras año. A pesar de saber que los medios de comunicación no darían cancha a tal decisión.
Tal y como estaba previsto, está ocurriendo. No hay noticia del acto, que celebraremos el próximo sábado, en los principales medios de comunicación regionales. Nos encontramos, como no podía ser de otra forma, con el “poder” intentando controlar “todo”, incluyendo la libertad de expresión. Por eso siguen siendo necesarios estos premios.

sábado, 3 de noviembre de 2007

La Talá, ilegal

Xuan Cándano, me llama un día y me dice: "He estado en una charla que daba nuestro amigo común Fernando Urruticoechea. Te ha citado un par de veces por la imputación que tienes por lo del Pleno de La Talá. Nos vemos un día y escribo algo del asunto.
Escribió esto en La Nueva España, en la sección de opinión:

Un dirigente vecinal exhibe una camiseta en un Pleno municipal contra una urbanización en la costa. La Policía lo expulsa. Dos años después, se enfrenta a una pena de dos años y cinco meses de cárcel por escándalo público y desobediencia a la autoridad.

Esto no sucede en una dictadura bananera en África, en un país islamista o en la Corea comunista. Fue en Llanes el 2 de septiembre de 2005 y el protagonista es Domingo Goñi Tirapu, al que sus amigos llaman «Txomín». Ese día el secretario de AVALL tuvo una jornada inolvidable. Por la mañana su perro «Trasgu», un pastor vasco, apareció destrozado. Alguien lo atropelló salvajemente con un vehículo pesado para enviarle una señal a su dueño, que sólo pudo reconocer su rabo. Después, en el Pleno, cuando llegó el punto caliente del orden del día, Txomín se quitó la camiseta para exhibir otra en la que se podía leer: «La Talá, ilegal». Lo mismo hizo el presidente de AVALL, Eduardo Carrero.
Como Txomín desobedeció la orden de la alcaldesa, Dolores Álvarez, para que retirase su camiseta, dos policías locales lo expulsaron de la sala. Se resistió y forcejeó con los agentes. Fuera del salón de plenos lo arrojaron al suelo y lo esposaron. Estuvo dos horas con las esposas. Pidió sin éxito que se las retiraran porque le hacían mucho daño. Tuvo una tendinitis tres meses y una policía local un dedo lesionado cuatro días.
Luego lo trasladaron al cuartel de la Guardia Civil y lo acusaron de escándalo público y desobediencia a la autoridad. La Alcaldesa lo denunció y también solicita su inhabilitación como secretario de AVALL. Un Juzgado de Oviedo la avala y pide para Txomín dos años y cinco meses de cárcel. En cambio, su denuncia contra la Alcaldesa y los policías municipales se archivó en el Juzgado de Llanes y ahora está a la espera de sentencia en el Tribunal Constitucional.

Dicen que vivimos en un Estado de derecho, pero a veces parece que soportamos más bien un Estado de la derecha más extrema. Y ese rostro democrático con prácticas dictatoriales genera muchas contradicciones.

AVALL es una asociación declarada de interés público por el Ministerio del Interior, por lo que tiene derecho a justicia gratuita. Y parece una decisión muy consecuente. Si no llega a ser por esta asociación, nacida en 1991 cuando Llanes comenzó a soportar una enorme presión urbanística, hoy la ensenada de Niembro o la playa de Cuevas del Mar estarían inundadas de cemento, por poner un par de ejemplos entre los proyectos frenados por los conservacionistas.

Pero entre lo que el Estado declara y lo que hace media el abismo que hay entre la razón y los intereses. Tipos como Txomín son imprescindibles para la sociedad, pero muy peligrosos para el poder. Este navarro de mirada franca y risa fácil es un estorbo para los constructores, para los gobiernos y para los dueños del dinero. Es un modesto profesor de instituto, ya jubilado, pero molesta porque es un activista que aborta negocios. Un luchador con causa, condenado al ostracismo, que en los medios sólo aparece protestando, como cuando estuvo cinco días acampado y en huelga de hambre, aunque si hablas con él no pierdes el tiempo y descubres a un idealista inteligente y bien informado. Ahora le amenaza la cárcel, pero antes ya soportó otras de muerte e intentos de agresión. Una vez le acorralaron entre media docena de individuos.

En algún despacho debió tomarse la decisión de apartar a Txomín de la vida pública. Para ello se le aplica la misma norma que llevó a la cárcel a Cándido y Morala. Es una ley aprobada por el PP para defender a los demócratas de los violentos en Euskadi, pero ahora se aplica contra obreros y ecologistas que incordian demasiado.

Si Txomín acaba entre rejas podrá lucir su camiseta en libertad dentro de la celda. Si la libertad de expresión estuviera suficientemente garantizada, como corresponde a un sistema democrático, quien se enfrentaría a la justicia sería la Alcaldesa.

Mientras el caso se resuelve, las obras de La Talá continúan cubriendo de hormigón una zona virgen de la costa llanisca, la más apetecida por los constructores. Desde el alto del Mazucu, donde los republicanos intentaron frenar al fascismo hace 70 años, ya se ve la herida en el paisaje de La Talá. Quinientas viviendas, grandes bloques y la inevitable gran superficie comercial arruinarán lo que fue un espacio protegido y enriquecerán algunos bolsillos. Una operación ruinosa para los llaniscos. Aunque en Llanes no se pueda contar con tres palabras.